<body><script type="text/javascript"> function setAttributeOnload(object, attribute, val) { if(window.addEventListener) { window.addEventListener('load', function(){ object[attribute] = val; }, false); } else { window.attachEvent('onload', function(){ object[attribute] = val; }); } } </script> <div id="navbar-iframe-container"></div> <script type="text/javascript" src="https://apis.google.com/js/platform.js"></script> <script type="text/javascript"> gapi.load("gapi.iframes:gapi.iframes.style.bubble", function() { if (gapi.iframes && gapi.iframes.getContext) { gapi.iframes.getContext().openChild({ url: 'https://www.blogger.com/navbar.g?targetBlogID\x3d33821413\x26blogName\x3dVIDA+DE+UN+PSIC%C3%93LOGO\x26publishMode\x3dPUBLISH_MODE_BLOGSPOT\x26navbarType\x3dBLUE\x26layoutType\x3dCLASSIC\x26searchRoot\x3dhttps://psicobiografia.blogspot.com/search\x26blogLocale\x3den_US\x26v\x3d2\x26homepageUrl\x3dhttp://psicobiografia.blogspot.com/\x26vt\x3d-7852379753506052794', where: document.getElementById("navbar-iframe-container"), id: "navbar-iframe" }); } }); </script>


Ví­nculos: Vida de Familia | Traducciones disponibles | Vida de un psicólogo | Conócenos

 


    | Un sueño

    Recuerdo que a mis 12 años mi gran ilusión era navegar en el mar, algo normal para un niño de esa edad, lo que no lo era tanto es que fuera en una embarcación hecha por mi mismo.

    Le compartí la idea a mi amigo Jose y el se embarcó conmigo en el sueño de navegar por el mar de ésta manera.

    Soñabamos juntos en como sería el diseño de la nave, si tenia o no motor, si se iba a maniobrar con timonel o no.

    Lo que acordamos fué que el motor iba a ser un motor de un abanico viejo que había en el cuarto de San Alejo de mi casa y que el timonel iba a ir conectado a ese abanico con dos cabuyas gruesas que lo iban a hacer girar, claro teniamos que tener una batería de carro que le diera la energía "suficiente".

    Mientras yo me las daba de ingeniero naval, mi amigo, que no era mas cuerdo que yo, tenía una serie de diseños de antenas parabolicas hechas con poncheras y ganchos de ropa, conectados por medio de cables de teléfono.

    Que hermosos esos momentos donde la creatividad abundaba, donde no había imposible, y los problemas era algo que solo veían los adultos.

    Publicado por Vaso dispuesto a las 7:06 PM,

    0 Haga su comentario:

    Post a Comment

    << Home